miércoles, 22 de junio de 2011

si yo fuera rica.....

Ami nunca me ha costado nada imaginar. Sueño despierta desde que tengo memoria. Ha habido épocas de mi vida en que he sobrevivido a la realidad adversa gracias a mi facilidad para evadirme en mis sueños. A veces pienso que gracias a eso he podido sobrevivir.

Uno de mis pasatiempos de los últimos tiempos consiste en imaginar cómo y con quien repartiría una cantidad indecente de millones de euros, pongamos por ejemplo los 119 que se juegan mañana y os lo voy a contar:

Lo primero de todo sería no creerme que me ha tocado. Tendría que comprobar una y mil veces que coinciden los números con las fechas y hacer como otras mil llamadas a la ONLAE para lomismo. Una vez comprobado, seguro que llamaría a mi madre la primera. Intentaría decirle sin volverme loca que la fortuna nos ha cambiado y que toda nuestra vida cobra un nuevo sentido. 

Y entonces empezaría a llamar a mi lista de beneficiados ( que debo decir se ha mantenido fija desde hace mucho, con algunos añadidos que he hecho en los últimos meses:

Mi hermana Xira, porque es mi enanita y mi hermana

Mi prima Diana, porque también lo es

Mis amigas Jacqui, Emma, Aranchina, Poli, Zayda, Lily, Eva Reduello, Silvia López y Laurita, porque forman parte de mis recuerdos, de mi presente y llenan todos los días de mi vida con su existencia

Mi amigo Gaetano, porque le quiero como a un hermano

Mis primas segundas Reyes y Julita, porque se lo merecen
Mi primo segundo Angelín, porque ha luchado mucho desde muy joven
Mi primo segundo Manolín, porque siempre que ha podido ha echado una mano

Mi tío Jose, porque ni con todo el oro del mundo podría pagar lo que ha hecho por mi familia

Compartiría el premio a partes iguales con ellos, que tenemos mas que de sobra, y me daría el gustazo de hacer feliz a la gente a la que quiero.

De mi parte separaría unos cuantos miles de euros y los metería en sobres en billetes de 500€ que repartiría entre algunos de mis compañeros de trabajo, solo aquellos que me han hecho sentir bien, que han sido amables y cariñosos conmigo a lo largo de los años.

Luego convencería a mi hermana para organizarle a mi madre un viaje sorpresa a Ucrania, para conocer a nuestra familia, a quienes les compraría todo lo que necesitasen para que vivan mejor y salgan de la larga sombra del comunismo que aún perdura.

Claro que mientras tanto usaría el tiempo que me sobrara para arrasar en cada tienda que me cruce y comprarme una pedazo de casa en Gijón para no volver a separarme nunca jamás de mis seres queridos ni de la tierra que amo.

Y buscaría un banco de semen ( uno rubio de ojos azules que conozco, jeje) y tendría un hijo yo sola, porque quiero y porque podría.

Muchas veces imagino estas cosas, estos momentos, y siento lo feliz que sería yo haciendo felices a los demás y también la felicidad que me daría la libertad de no tener que emplear el tiempo de mis pensamientos cuidando del futuro, sino disfrutando el presente.

Mañana voy a jugar....

viernes, 17 de junio de 2011

Invisible woman

Invisible....así es como me siento últimamente.

La verdad es que es algo novedoso y en cierta manera me alegro de experimentarlo porque así puedo comprender cómo se han sentido antes algunas personas a mi lado.

Hace algunos años salía con una amiga que siempre me decía que nadie se acordaba de ella cuando salíamos porque los espontáneos que se nos acercaban solo se fijaban en mi. Yo pensaba que había en ello algo de exageración aunque no estaba exenta de cierta razón, pero bueno, ahí quedó el tema.

Hoy soy yo la que se siente invisible y la verdad es que me sorprende, será por la falta de costumbre.

Tengo una amiga muy muy muy guapa, llamémosla X, que reune una serie de requisitos que no sólo influyen en sus circunstancias sino también en el mundo que la rodea, y me explico: mide 1´76, tiene el pelo negro, una boca preciosa, pómulos marcados, la piel morena, fue modelo, pero modelo de verdad!!! y para mas INRI pone cara de guarra cuando baila ( lo siento X, sabes que es verdad).

Con ella me vuelvo invisible. No traslúcida ni borrosa, no, invisible! La semana pasada pude comprobarlo, incluso con cierta diversión. Me planté delante de dos individuos que habían insistido en invitar..nos? a una barbacoa. Creéis que me miraron como diciendo, uy esta chica me suena??? Noooooooo!!!! Creedme: no me habían visto en su vida....mi imagen había sido eclipsada por la energía arrolladora de la belleza superior...

De hecho esa misma noche me pasó lo mismo con otra chica, esta vez de pura raza aria: rubia,ojos azules, altíííííiííííísima, con carita de angel....y en chanclas!!!!  Yo iba monísima con mi vestido blanco y mis zapatos plateados......pero se ve que sólo yo me di cuenta, son las cosas de la invisibilidad, que solo una puede disfrutar de la imagen propia.

La parte positiva es que la invisibilidad también supone libertad. Ahora soy libre para salir hecha un trapo y en sandalias bajas porque total, haga lo que haga, no van a  verme, asi que por qué pasar un mal rato sobre los tacones cuando puedo disfrutar de mi transparente existencia en chanclas....porque yo lo valgo!!! o porque no lo valgo!!! qué mas da!!!

Se lo que me vais a decir: que es imposible, que estoy exagerando, que como voy a ser invisible yo! Pues siiiiiii, creedme!!!.No me siento triste,ahora al menos siento que tengo mas opciones y me he librado de llevar sobre mis espaldas el peso de la imagen perfecta, del estar impecable.

Ahora que soy invisible, qué curioso, también soy mas libre.

Besitos.

martes, 7 de junio de 2011

Unos vagos, unos quinquis y unos marranos

...no es el título de un chiste eh! Es como definía en sus tiempos mi abuelo a los hippies, o para entendernos, a los jipis.

Yo, que de aquellas era ( nótese la forma verbal en pasado) muy tolerante y abierta de mente no estaba de acuerdo con su definición. Me parecían personas con una idea alternativa de la vida, que aportaban ideas muy sanas a un mundo demasiado dominado por los estereotipos marcados por sabe dios qué poderes y que en general, no hacían daño a nadie.

Con el tiempo y la vida me fui dando cuenta de que el camino marcado para mi estaba mas cerca de las Rocas del baño que de las de los caminos, y que eso de las acampadas y la vida natural con olor a sobaco no era lo mío. Lo siento, siempre he tenido vocación de Barbie Hilton, es lo que hay. Me gusta oler a cremas y a perfume y parecer una muñequita en la caja mas que una decapitada...

Hoy me tocó hacer un largo recorrido en autobús. Ha sido una de las experiencias olorosas mas intensas que he vivido en mucho tiempo.Para empezar el autobus olia a queroseno todo él...argh...quise solucionarlo echándome perfume...craso error....todo me olía a perfume con queroseno. Cuando ya estaba medio mareada de la peste se me sienta detrás un tío con un aliento etílico mas propio de un pirata en sábado noche que de un chorizo embutido en una camiseta a rayas, que es lo que era....( chorizo a la sidra????). Sin embargo lo peor estaba por llegar.

Un par de paradas mas allá y estando casi en un estado semiinconsciente causado sin duda por los efluvios corporales y químicos de aquel bendito transporte urbano veo entrar a dos seres de leyenda: el australopithecus y el neanderthal...Ah no!!! que eran dos jipis, joer!!!

Así como en los míticos años sesenta, tuve que mirar dos veces para distinguir al macho de la hembra, que se dice pronto. Pasaron por el pasillo a mi lado, con el cargamento habitual de bultos y bolsas cochambrosas y seguidos de un indescriptible tufo a muerto que me dejó ya para el arrastre. Aprovechando una parada me cambié de sitio a un lugar donde pudiera darme mas el aire. Al cabo de nada se bajaron del bus. Les observé desde la ventanilla, intentando comprender qué tipo de filosofía puede llevar a eso. Si les mirabas a las pantorrillas no podías tampoco distinguirles porque los pelacos de ella poco o nada tenían que envidiar a las patillas del hombre lobo de mi gimnasio. Iban descalzos, las plantas de los pies negras y con relieve ( de tanta roña, digo yo). Y lo peor: iban al aeropuerto. Y a esos les van a permitir volar, sentados junto a algun pobre desgraciado que llegará inconsciente a su destino? No hay máquinas de esas que pitan cuando detectan la mugre???


Estoy segura de que cuando surgieron los primeros jipis lo hicieron como un movimiento en reaccion a unas condiciones de vida con las que no estaban de acuerdo, defendiendo unas ideas y luchando por crear un mundo donde una vida alternativa fuera posible, pero esto que yo he visto solo responde al afán de estar lleno de mierda y de no dar golpe ni para despiojarse mutuamente, lo dicho, vagos, quinquis y marranos. Tenías razón buelito.

Besitos.

viernes, 3 de junio de 2011

miércoles, 1 de junio de 2011

Vida de perros, muerte de dioses

Si si, vida de perros...

Tras la muerte de mi perro me dio por pensar dos cosas.

La primera que , sin duda, ha vivido infinitamente mejor que muchas personas. Pensémoslo bien: Nunca ha tenido que trabajar, todos los días de su vida ha encontrado el plato en la alfombra bien llenito, la cama hecha y limpia, ha viajado gratis, ha recibido mimos y atenciones de cada persona nueva que conocía, le han dado chuches solo a cambio de una mirada graciosa, si se ha puesto enfermo ha ido al médico sin tener que pagar  ni esperar colas, ha tendio peluquero, manicura e incluso quien juegue con él un ratito cada día. Nunca ha tenido que preocuparse por la dieta o la forma física y nadie le ha reñido por destrozar sus juguetes. Y así podría seguir un largo rato.

Por si esto fuera poco y para acabar de sorprenderme, ni siquiera ha tenido que sufrir antes de morir, porque en cuanto se sospechó que podría pasar dolor, que podría padecer...le dieron un sedante para dormirse y alli, en los brazos de mi madre, sin enterarse, pasó al otro mundo.

Lo que yo me pregunto es qué habremos hecho los seres humanos para no ser beneficiarios de tan altas atenciones, porque si ya sabemos que no nos van a proporcionar una vida como la de mi perro...Por qué se atreven a negarnos también una muerte digna??

Me vais a perdonar pero no lo entiendo. No estoy hablando de convertirse en el Dr. Muerte y decidir a dedo quien vive o quien debe morir. Pero es que sigo sin verle el sentido a que cuando te han desahuciado, cuando estás en la cama de un hospital sin ni siquiera ser consciente de tu propia existencia, haya sociedades enteras empeñadas en que agonices hasta que exhales tu último aliento, cueste lo que cueste y sufras lo que sufras.

Todos conoceis casos desgarradores de personas que han agonizado desgarradoramente hasta el último minuto...ese minuto que mas de uno hubiera pagado porque llegara antes. Supongo que la mayoría nos agarramos a la vida como al borde de un acantilado, pero no todos. Y yo reivindico el derecho de quienes asi lo desean a morir como perros: envueltos en el abrazo amoroso de un ser querido, tranquilos y en paz.

Besitos